jueves, 18 de noviembre de 2010

Esperar cosas de los demás es tiempo que jamás volverá





¿Por qué esperamos cosas de los demás si sabemos bien  que no podemos pretender que todos piensen y vean como nosotros?
Pretendemos que todos nos vean y vean todo como nosotros, que piensen y sean como nosotros, pero no podemos pretender eso, si sabemos que eso es  perder ese tiempo que no volverá y en el transcurso de ese tiempo más desilusión y decepción traerá.
Siempre esperamos que el otro reaccione como nosotros lo haríamos, o hacemos algo y esperamos que si nos hubiera pasado a nosotros ellos hicieron lo mismo, pero es algo que solo trae desesperación, por que esperar que el otro reaccione y sea tal cual queremos es un sueño un dulce sueño con una dulce agonía, acompañada de una placentera desilusión y decepción provocada por una simple realidad, una realidad que nunca podremos cambiar.
No podemos aprender a vivir nuestra vida sin pretender que los demás la vivan igual que nosotros, el día que dejemos de pretender cosas de los demás va a ser el día que los chanchos vuelen, por que es una necesidad, un capricho, una mentira que nos da placer creer por un rato que esa persona es perfecta, es tal cual la queremos y va a reaccionar tal cual lo pensamos, pero cuando esa realidad nos vuelve a golpear, y ahí es cuando los  caprichos, las necesidades, las mentiras se vuelven oscuras y sin salidas, creemos que todo esta perdido y vine el llanto, el llanto acongojado, que solo nos llevara de momentos a momentos, que nos recuerda a esa persona,  nos ponemos mal, por lo que hicimos, por lo que no hicimos, por lo que paso, lo que  no paso, y vamos momento a momento y cada uno de esos momentos nos trae mas recuerdo junto con mas llantos, por que queremos volver a ese momento ; sentir eso que sentíamos en ese mismo momento, esos olores, esas sensaciones, sensaciones que cada vez que las recordamos la piel se nos pone de gallina y sentimos ese momento como si estuviera pasando en ese mismo instante.
Pretender que los demás sean como nosotros queremos, es esperar sentado eso que nunca llegara, por que cuando nos “enamoramos” nos enamoramos de lo que nos muestran y cuando nos imaginamos como serian las cosas ahí es cuando empieza una gran fantasía, que solo termina en el momento de la desilusión y en un triste llanto acongojado,  como un recuerdo y  sensaciones que jamás volverán. Mientras esperamos que eso vuelva a ocurrir y esa persona se vuelva para convertirse en  nuestro príncipe azul vemos pasar la vida…